FIESTAS DECEMBRINAS PARA
DISFRUTAR
ALBA LUCIA CASTRO
SOTO, psicóloga, dic 2015
Hay personas gozonas
que se disfrutan cada momento de la vida, porque se concentran a vivir el
presente, viven a consciencia cada cosa que sucede a su alrededor por tanto
pueden ver las cosas agradables, convenientes y pueden rechazar aquello que
puede traerles problemas en el presente o el futuro.
La época decembrina,
es plena en colorido, sonido y emociones. Son días para disfrutar de la
compañía de familiares, amigos y compañeros. Mas no se necesita de eventos
superespeciales y costosos para propiciar encuentros llenos de calidad humana.
Basta compartir un refresco y un pasaboca mientras comparten los últimos sucesos.
Salir de compras es un
plan que puede ser agradable si se hace con buena compañía, sin afanes y con un
plan austero. Recuerde que el regalo de navidad, es un símbolo, porque el
verdadero regalo de amistad, aprecio, gratitud o amor, es la dedicación,
escucha, apoyo moral, ayuda honesta, fidelidad y lealtad que se brinda cada
día.
Para que salir de
compras sea un plan exitoso al presente y al futuro, no bote la casa por la
ventana. Haga un presupuesto y no gaste más de lo que tiene, no se endeude porque
la situación política y económica mundial y colombiana está complicada, por eso
todo colombiano esta fácilmente expuesto a que cualquier día se quede sin parte
de los ingresos que hoy recibe.
Respecto a las
visitas y a las fiestas que se organicen, sea asertivo para no gastar más de lo
que puede, haga un presupuesto lo más real posible para determinar cuánto puede
Ud. aportar. Sea amable, sereno y directo al expresar lo que puede ofrecer a la
visita o dar para la fiesta y diga que espera que pongan los demás, establezca
acuerdos concretos y claros, así nadie se desgasta ni se generan males
entendidos.
Cuando decida ir a
una rumba aclare cuál es el objetivo principal de la fiesta y las condiciones
en que se dará, por dos razones, 1) para que vaya dispuesto a disfrutar y dejar
que los demás disfruten y 2) para que no la embarre pasándose de tragos.
Cada persona y grupo
familiar tiene su estilo de celebrar, dentro de sus costumbres y posibilidades
económicas, por tanto aceptar una invitación, es aceptar la fiesta tal como es,
sin criticar, juzgar ni mucho menos ir a comportarse inadecuadamente pidiendo
whiskey cuando no hay licor o solo hay cerveza.
Pero ante todo, debe disfrutar
de la celebración, mas no ver en la fiesta una oportunidad para beber alcohol
como barril sin fondo y mucho menos para mezclarlo con bebidas energizantes o psicoactivas
que les hacen perder la capacidad de análisis, el control de las emociones y
los predispone a accidentarse, agredir, ofender o mínimo a irrespetar a su
pareja y a los anfitriones con su inadecuado comportamiento.
Vele por la
seguridad, bienestar y felicidad suya y de su familia en estas fiestas
decembrinas.